Semana Santa está a la vuelta de la esquina y es posible que aún no sepas qué hacer. Si estás buscando una experiencia diferente, lejos del bullicio y las multitudes, esta puede ser la oportunidad perfecta para un
viaje con sentido: ¡prueba el
voluntariado!
Descubre una nueva pasión: ser solidario. Con tan solo 9 o 10 días, podrás combinar el
turismo solidario con la aventura de conocer nuevos lugares y culturas. ¿El primer paso? Escoger el país que más te atraiga o donde los billetes de avión sean más asequibles y directos. Luego, elige el proyecto que más resuene contigo.
Imagina
viajar a Costa Rica, un país lleno de biodiversidad y proyectos increíbles en los que puedes participar:
Si lo tuyo es el amor por los animales, puedes optar por un
voluntariado en un refugio de animales. Aquí, el objetivo es rehabilitar a animales salvajes como monos, aves, osos perezosos y reptiles que han sufrido daños o enfermedades, para luego reintroducirlos en su hábitat natural.
Como voluntario, estarás en contacto directo con estos animales, cuidándolos y ayudando en su recuperación.